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sábado, 18 de abril de 2009

El Amaranto o Huatli


México D.F. a domingo 19 de abril de 2009
C-04-06

EL AMARANTO O HUAUTLI

Adriana De León. Dentro del maravilloso legado que dejaron nuestros antecesores contamos con una canasta básica en nuestra alimentación basada en el Fríjol, el maíz, El chile, pero no esta considerado el AMARANTO.

Su cultivo se remonta a más de siete mil años. Algunos autores afirman que los Mayas serían los primeros en cultivarlo y que luego poco a poco lo fueron haciendo Aztecas e Incas.

Miles de hectáreas de tierras del Anahuac, Incas y de otras culturas, se encontraban cultivadas con estas hermosas plantas altas y rojizas; 17 provincias mandaban -al igual que maíz, frijoles, calabazas y chiles- más de 20,000 toneladas de sus granos a la antigua Tenochtitlán (hoy la Ciudad de México), en tributo anual al emperador azteca Moctezuma.

No obstante, el uso del huautli o amaranto tiene su origen desde la época prehispánica, al grado que entre las antiguas culturas era considerado como un alimento ritual al que se le atribuían propiedades curativas. Este era consumido en ceremonias religiosas o teofagia (comerse a los dioses), para las cuales se elaboraban figuras de deidades con harina de este grano, mismas que consumían quienes previamente habían confesado sus faltas de tipo moral.

La práctica prehispánica relacionada con el amaranto se vio desplazada durante la Colonia por la religión católica, que vio con malos ojos este equivalente a la comunión cristiana, sólo que en lugar del trigo, las civilizaciones prehispánicas usaron el amaranto para elaborar el cuerpo de sus dioses.

El historiador de la UNAM, Salvador Reyes Equiguas, llevó a cabo una investigación sobre el huautli en la cultura nahua, misma que recibió el Premio Francisco Javier Clavijero, de Historia y Etnohistoria, en la categoría de Maestría, en la pasada entrega de Premios Anuales INAH, establecidos por el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) con la finalidad de dar impulso a las investigaciones de las áreas antropológicas a nivel nacional.

El amaranto tuvo una gran relevancia entre las civilizaciones prehispánicas, particularmente en los hablantes del náhuatl, como los mexicas, tlaxcaltecas, chalcas, xochimilcas y tlahuicas. En la actualidad algunas comunidades que hablan esta lengua siguen cultivando la planta para fines rituales y comerciales.

A través de este trabajo, titulado El huautli en la cultura náhuatl, Reyes busca desentrañar los motivos que produjeron el decaimiento de la producción de este grano a partir de la época Colonial. “Parece ser que ante el valor ritual y cultural que le daban las antiguas civilizaciones, con la elaboración de representaciones de sus dioses, la introducción de la religión cristiana que crea al nuevo Dios a partir del trigo, desplazó al amaranto. Entonces el abandono de su cultivo se dio por asuntos de tipo social y religioso”.

En la antigüedad, el huautli formaba parte de una comunión o ritual de geofagia, que se denominaba teoqua, en el que se creaban figuras de los dioses con harina de este grano, que se llamaban ixiptla.

Las ceremonias en las que se hacía ayuno, ofrendas y danzas, no sólo se hacían con fines de pedimento de lluvia, sino también para saneamiento de padecimientos cuyo origen se atribuía a faltas morales y relacionadas con el agua, como la sífilis y la deformación de huesos por fiebre reumática, respectivamente. “Quienes tenían faltas y las confesaban ante los sacerdotes de Tlazolteotl y Tezcatlipoca, éstos les prescribían que después de la confesión tenían que comer los ixiptla, con lo cual se rompía el ayuno”.

La masa con la que creaban a sus dioses era llamada tzoalli, compuesta por harina de amaranto previamente tostado y miel negra de maguey, que le daba consistencia y ayudaba a moldear las figuras. “Este alimento lo podían conservar durante mucho tiempo y comerlo de acuerdo a las necesidades cuando enfermaban, según dicen los escritos en náhuatl y de evangelizadores y cronistas españoles.

Hay versiones que señalan que los españoles en su afán por erradicar este ritual pagano, prohibieron el cultivo del grano, como el caso de los hongos y el peyote, aunque nunca se ha encontrado una restricción expresa en contra del amaranto, como en el caso de dichas plantas alucinógenas. Y aunque hubiese existido no significa que haya tenido éxito.

La decadencia del cultivo del amaranto también tuvo un origen social. Si bien el maíz era la planta por excelencia en Mesoamérica, el huautli se cosechaba como un grano alternativo en los casos en los que se tenía una mala cosecha de la gramínea.

“Si había un mal año en la cosecha del maíz, el temporal era salvado por el amaranto al ser una planta más resistente a cambios climáticos. Por ello, este grano era asociado a tiempos de ayuno, abstinencia y pobreza”, sin embargo la llegada del trigo a América desplazó su producción.

“Las mejores tierras se destinaron al cultivo del trigo, y en segundo lugar al maíz, mientras que el amaranto al ser alternativo, quedó en un lugar ínfimo” pero a pesar del paso del tiempo, en la actualidad todavía se siembra el huautli con fines rituales, y en mayor medida para su comercialización.

En algunas comunidades de la montaña de Guerrero, investigadores del INAH han documentado la sobrevivencia de rituales de petición de lluvias, para los que elaboran tamales de amaranto en forma de deidades que se ofrendan en los cerros. De la misma manera, en localidades cercanas a Texcoco, Estado de México, este tipo de alimentos se colocan en las ofrendas de Día de Muertos.

La tradición oral de Tulyehualco, en la delegación Xochimilco, atribuye a Fray Martín de Valencia la receta de la golosina de la “alegría”. Durante su labor misionera en sitios como Chalco, Mixquic y Xochimilco, el religioso tuvo la idea de crear un alimento basado en el grano reventado del amaranto mezclado con miel.

Tal hecho se ubica a mediados del siglo XVI, cuando el evangelizador franciscano lo dio a probar a los indígenas y a éstos les dio tanta alegría que empezaron a bailar y a tocar música, aludiendo a un antiguo ritual prehispánico, lo que dio origen a la golosina conocida hoy como “alegría”, Tulyehualco, Distrito Federal; Zacualpan de Amilpas, Morelos; Huaquechula, Puebla y San Miguel del Milagro, Tlaxcala, son de los principales sitios de producción del amaranto con fines comerciales, excepto en las localidades del Balsas en Guerrero que lo hacen con fines rituales.

Actualmente el grano es sometido a distintos procesamientos para la elaboración de productos que van desde el dulce de la “alegría”, galletas, pastas, cereales, entre otros.

En náhuatl el nombre del amaranto (Amaranthus hibridus) es huauhtli; entre los huicholes se le conoce como wawi, y muchas otras lenguas indígenas tienen un nombre específico para este vegetal originario de México y Perno En zapoteco es ba-llaa, de acuerdo con el botánico Maximino Martínez, aunque entre los hablantes actuales ha persistido quintonil, que es palabra náhuatl.

El tiempo de crecimiento del amaranto es de casi nueve meses a partir de que se siembra la semilla, y tiene la gran ventaja de que cuando alcanza un tamaño medio ya pueden cosecharse las hojas sin que la planta se destruya.. De esta manera el ama de casa tiene a la mano un magnífico alimento.

Nuestros antepasados aplicaron conocimientos científicos y tecnológicos para lograr el reventado de esta semilla, como lo hicieron con los granos del maíz para producir lo que hoy conocemos como “palomitas”, técnica que permite que la semilla se digiera mejor y alcance su mayor valor proteínico. A través de un largo trabajo de selección, los indígenas lograron una alta producción de semillas blancas, pues las negras resultaban duras y un poco amargas. Este proceso de domesticación admira aún a los biólogos contemporáneos.

El maíz y el fríjol (nativos de nuestro continente) se convirtieron en dos de los cultivos principales que alimentan al mundo, mientras que el amaranto pasó a la oscuridad. La conquista española terminó con su uso como un artículo de primera necesidad en América, su cultivo cayó en desuso y solamente sobrevivió en América en pequeñas áreas de cultivo esparcidas en zonas montañosas de México y los Andes.

La diseminación de este alimento altamente nutritivo en la agricultura mundial tuvo que esperar a su "descubrimiento" por la ciencia del siglo XX. Hoy en día el cultivo de amaranto está tomando un gran auge, ya que se están redescubriendo sus grandes propiedades. Aparte de producirse en países tradicionales como México, Perú o Bolivia ya hay otros que se han puesto manos a la obra como China, Estados Unidos o la India. El Lejano Oriente es donde más ha sido utilizado.

El amaranto tiene grano; el cual una vez limpio y seco puede ser guardado durante muchos años. Este grano, forma parte del grupo de cereales; con características nutricionales muy valiosas, tiene un alto contenido de proteína mayor que el de otros cereales como el maíz y el trigo; es rico en hidratos de carbono; contiene poca grasa y es rico en fósforo, calcio, potasio y magnesio.

En la actualidad es aprovechada casi toda la planta del amaranto: los tallos tiernos se consumen como verdura y sus hojas se guisan; pero la parte más utilizada es la semilla, ingrediente básico en incontables alimentos, principalmente la típica "alegría", que hasta hoy es elaborada con un proceso similar al que se usaba en tiempos de Moctezuma.

El amaranto es un vegetal con un muy alto valor nutritivo por su alto contenido de proteínas, aminoácidos y minerales. Se siembra en muy baja escala, y por ello los investigadores no han desarrollado un material genético que pueda ser calificado como variedad. Es una hierba anual productora de pequeñas semillas en abundancia. Estas semillas tienen propiedades particulares que, aún no siendo gramíneas, se pueden conservar por tiempo prolongado sin que pierdan sus propiedades.

Una de sus principales propiedades es que revienta en condiciones muy calientes y se convierte en una palomita cerealera, con muy alto contenido nutritivo, con 15 a 18 % de proteína y presencia de lisina y metionina, alto contenido de fibra, calcio, hierro y vitaminas A y C. Además es una planta muy adaptable a condiciones de crecimiento muy limitadas en agua y nutrientes minerales. Resiste mucho el calor extremo.

Se puede usar la hoja fresca y seca, el grano seco molido, el grano seco reventado y muchas combinaciones como mezclador alimenticio. Tradicionalmente se prepara para palanquetas llamadas “alegría fina” con miel de abeja y “ordinaria” con piloncillo. No es panificable por la ausencia de gluten, pero se puede anexar a la harina de trigo para panificación y repostería, y con maíz y soya para tortillería.

Con amaranto se preparan atoles, papillas y mazapanes. Estos productos de amaranto se siguen mejorando por combinaciones de harinas, para aportar alimentos de alto contenido nutritivo y gustativo, dirigido a la nutrición de niños, desde muy temprana edad. Ha sido considerado por la Organización Mundial de la Salud como uno de los alimentos recomendados para el futuro, y la NASA lo incluye como un alimento para un futuro lejano.

Actualmente la mayoría de la población mundial recibe el grueso de sus requerimientos proteicos y calorías de 20 especies vegetales únicamente, en especial de los cereales como el trigo, el arroz, el mijo y el sorgo; tubérculos como la papa, el camote y la cassava; leguminosas como el fríjol, el cacahuate y la soya, y otros alimentos, como la caña de azúcar, el betabel y el plátano.

Conscientes de la conveniencia imperiosa de diversificar la base alimentaria tanto en una escala global como a nivel individual, la Academia Nacional de Ciencias de los Estados Unidos realizó un estudio extensivo para precisar los cultivos óptimos para su desarrollo y diseminación. El resultado, publicado en 1975 en un estudio titulado "Plantas tropicales subexplotadas con valor económico prometedor", seleccionó al amaranto dentro de los 36 cultivos más prometedores del mundo, determinando que el amaranto es un buen alimento de origen vegetal para consumo humano.

Desde entonces se han realizado exhaustivas investigaciones sobre el amaranto, confirmando su enorme potencial como alimento de alta calidad.

El grano de amaranto, es considerado como un pseudocereal, ya que tiene propiedades similares a las de los cereales pero botánicamente no lo es aunque todo el mundo los ubica dentro de este grupo.

El objetivo principal de llevar a su mesa productos elaborados con amaranto o mezclados con él es el de dar un mejor valor nutritivo a los alimentos, a un costo muy económico, mejorando así el estado de salud de la población.

El amaranto puede ser la planta más nutritiva del mundo. Los botánicos y nutriólogos han estudiado el amaranto, y han encontrado una gran cualidad nutritiva, en especial un alto contenido de proteínas, calcio, ácido fólico y vitamina C. Semillas del amaranto tostado proveen una fuente de proteínas superior, que puede satisfacer gran parte de la ración recomendada de proteínas para niños, y también pueden proveer aproximadamente el 70% de energía de la dieta, también una combinación de arroz y amaranto, a una proporción de 1:1 ha sido reportada como excelente para alcanzar las especificaciones para proteínas de la Organización Mundial del Salud. (WHO por sus siglos en inglés).

El amaranto tiene un alto contenido proteico, aproximadamente 16 %. La semilla del amaranto compite bien con variedades convencionales de trigo que contiene de 12 a 14 % de proteína, al arroz que contiene de 7 a 10 % y al maíz que contiene de 9 a 10 % de proteína y con otros cereales de gran consumo. Además, el amaranto tiene abundante lisina, aminoácido esencial que está en baja proporción en los demás cereales. El amaranto tiene el doble de lisina que el trigo, el triple que el maíz, y tanta lisina como la que se encuentra en la leche.

No es únicamente la semilla del amaranto la que se utiliza, las hojas del amaranto pueden utilizarse como verdura desde que son tiernas. Estas hojas forman parte del grupo de los quelites u hojas comestibles. La hoja del Amaranto contiene más hierro que la espinaca por lo que se recomienda para personas que padecen de cierto grado de anemia.

Recopilación
Edith y Enrique


viernes, 17 de abril de 2009

Amaranto de Semillas de Color Negro


México D.F. a domingo 19 de abril de 2009
C-04-05

AMARANTO DE SEMIILAS DE COLOR NEGRO

Evaluación nutricional y toxicológica de dos variedades de amaranto de semillas de color negro (A. Uranguesis y A. Maurensis).

RESUMEN

Se evaluaron dos variedades de amaranto de semillas de color negro registradas en Cuba. (A. uranguesis y A. maurensis), con el objetivo de conocer sus características nutricionales y toxicológicas. Se determinó la composición de macronutrientes y de aminoácidos, la presencia de algunas sustancias tóxicas así como calidad de las proteínas, esta última mediante el cálculo del cómputo químico y un balance de nitrógeno en ratas. Los ensayos de alcaloides, saponinas, cianuro e inhibidores de tripsina resultaron negativos. El contenido de polifenoles fue bajo. La actividad hemaglutinante no se presentó uniforme, pero se destruyó por el calor. La leucina constituyó el primer aminoácido limitante con un cómputo del 50 al 55 %. El contenido de lisina fue 2 veces mayor que en el trigo. La ingestión de dieta de los grupos de amaranto fue sólo del 65 % con respecto al grupo alimentado con caseína. La digestibilidad de las proteínas alcanzó del 72 al 75 % y el valor biológico del 72 al 77 %. Se concluyó que las 2 variedades de amaranto presenta una aceptable calidad de las proteínas aun cuando la digestibilidad de las proteínas fue baja. Por otra parte, las semillas de amaranto no poseen una buena palatabilidad o contienen alguna sustancia tóxica que hace que las ratas rechacen la dieta.

Palabras Clave: AMARANTO/toxicología; AMARANTO/análisis; SEMILLAS/ análisis; EVALUACION NUTRICIONAL; CUBA; RATAS.

INTRODUCCION

Algunas variedades de amaranto han recibido especial atención debido a su alto rendimiento agrícola y a la buena calidad de sus proteínas.1 Como la harina de la semilla de amaranto tiene relativamente alto contenido de lisina y aceptables propiedades panaderas, se ha utilizado como suplemento en los alimentos derivados del trigo.2

Recientemente se registraron en Cuba 2 nuevas variedades de amaranto de semillas de color negro con los nombres de Amaranthus uranguesis y Amaranthus maurensis. El objetivo de este trabajo fue conocer las características nutricionales y toxicológicas de estas variedades, con el fin de evaluar sus posibilidades en la alimentación humana.

MATERIAL Y METODO

En las semillas de amaranto, que fueron suministradas por el Instituto de Investigaciones Fundamentales de la Agricultura Tropical de Cuba, se determinó la composición de macronutrientes,3 aminoácidos: la presencia de alcaloides4 saponinas,5 cianuros;6 el contenido de polifenoles;7 y la actividad hemaglutinante8 y de los inhibidores de tripsina.9 Los 2 últimos ensayos se realizaron en las muestras crudas y calentadas en autoclave a 121oC durante 10 min. La fibra dietética se determinó por un método in vitro modificado,10 la calidad de las proteínas, mediante el cálculo del cómputo químico11 y un balance de nitrógeno en ratas que permitió calcular la digestibilidad verdadera, el valor biológico y la utilización neta de las proteínas.12 Por cada grupo se emplearon 8 ratas Wistar de 60 a 65 g de peso. Como control se utilizó una dieta de caseína + 1 % de DL-metionina.

La evaluación estadística comprendió un análisis de varianza de doble clasificación.13 Para determinar la diferencia estadística entre las medias se utilizó la prueba de los recorridos múltiples de Duncan.

ANALISIS DE LOS RESULTADOS

Los ensayos de alcaloides, saponinas, cianuro e inhibidores de tripsina resultaron negativos para todas la muestras.

La concentración de proteína de las 2 variedades de amaranto se comportó mayor que la de los cereales (tabla 1) y en concordancia con los valores informados para otras variedades.1 El contenido de fibra dietética fue más de 4 veces mayor que el de fibra cruda, lo que se corresponde con la relación habitualmente encontrada entre estas variables,14 más aun en nuestro caso en que el concepto de fibra dietética del método utilizado para su cuantificación comprende todo material de origen exógeno que es excretado en las heces, incluyendo las proteínas no digeribles.

El contenido de polifenoles (tabla 2) se encontró en la intervalo normalmente informado para los alimentos de origen vegetal,15 aun cuando en general las semillas de color negro presentan valores más altos que la de color claro.16

La actividad hemaglutinante (tabla 2) contra los diferentes tipos de eritrocitos no se presentó uniforme, lo que confirma la alta especificidad de las lectinas para aglutinar los glóbulos rojos.17 Sin embargo, la acción del calor destruyó prácticamente toda la actividad hemaglutinante.

La leucina constituyó el primer aminoácido limitante para las 2 variedades de amaranto, con un cómputo químico del 50 al 55 % (tabla 3), mientras que la treonina resultó ser el segundo aminoácido limitante. El contenido de lisina fue 2 veces mayor que en las proteínas del trigo.

En general, la leucina aparece como el primer aminoácido limitante en las proteínas de amaranto.1 Este hecho unido a que poseen un mayor contenido de lisina que las proteínas del trigo hacen que ambas sean complementarias, por lo que una mezcla de ellas debe presentar una mejor calidad de las proteínas que la de estos componentes por separado.

La ingestión de dieta de los grupos de ratas que recibían amaranto fue sólo del 65 % con respecto a la del grupo que recibía caseína (tabla 4). Sin embargo, mientras este grupo tuvo un incremento en peso de 24,7 g en los 9 días que duró el experimento, los grupos alimentados con amaranto apenas variaron su peso inicial. Se ha informa do que las semillas de amaranto contienen ciertas sustancias que inducen una baja palatabilidad de las dietas e inhiben el crecimiento de los animales de experimentación cuando son suministradas como única fuente de proteínas.1

No se encontró diferencia para la digestibilidad verdadera y el valor biológico entre las 2 variedades de amaranto, valores éstos inferiores a los de la caseína en el 24 y el 17 %, respectivamente (tabla 4).

La digestibilidad de las proteínas de las 2 variedades de amaranto se comportó bastante baja y parece ser menor que la de otras variedades con semillas de color beige,1 resultado que pudiera estar influido por el mayor contenido de polifenoles y de lectinas encontrado en las semillas de color negro. Se ha demostrado que ambas sustancias influyen negativamente sobre la digestibilidad de las proteínas.18 Adicionalmente el alto contenido de fibra dietética también pudo ejercer un efecto negativo sobre la digestibilidad de las proteínas.19

El valor biológico de las semillas de amaranto alcanzó el 83 % con respecto al de la caseína, lo que puede considerarse como un buen valor dentro del conjunto de las proteínas de origen vegetal. La calidad de las proteínas de las 2 variedades de amaranto fue cerca de 2 veces mayor que la del trigo.20 Sin embargo, se observó una discrepancia bastante grande entre el valor biológico y el cómputo químico; la primera variable fue cerca de 1,5 mayor que la segunda. En general, el cómputo químico informado para las semillas de amaranto se encuentra alrededor del 70 %1 valor bastante superior a nuestros resultados, los cuales parecen estar influidos por el bajo contenido de nitrógeno de origen proteico encontrado en las muestras ensayadas (tabla 3).

CONCLUSIONES

Las 2 nuevas variedades de amaranto registradas en Cuba presentan una aceptable calidad biológica de las proteínas aun cuando la digestibilidad de las proteínas parece ser inferior a la de otras variedades de color beige. Por otra parte, las semillas de amaranto no presentan una buena palatabilidad o poseen alguna sustancia tóxica que hace que las ratas rechacen la dieta.

REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS

1. Teutónico RA, Dietrich K. Amaranth: composition , properties and applications of a rediscovered food crop. Food Tech 1985;39:49-58.
2. Vaidehi MP, Cijayalakshmi D, Nath KG. Aceptabilidad y eficiencia proteica de productos del grano amaranto en mezclas con cereales. El amaranto y su potencial 1993;12:19-27.
3. Helrich K, ed. Official Methods of Analysis. 15 ed. Arlington, Association of Official Analytical Chemists (AOAC) 1990:730-1.
4. Macked K, ed. Pharmaceutical applications of thin layer and paper chromatography. New York: Elsevier, 1972.
5. Rondina RV, Caussio JD. Estudio fitoquímico de plantas medicinales argentinas (1). Rev Invest Agrop 1969:6:351-66.
6. Burriel F. Química Analítica Cualitativa. La Habana: 1968. (Edición Revolucionaria).
7. Dev Choudhury MN, Goswami MR. A rapid method for determination of total polyphenolic matters in tea (Camellia sinensis). Tow Bud 1983;30:59-61.
8. Jaffé WG, Brucher O. Toxicidad y especificidad de diferentes fitohemaglutininas de frijoles (Phaseolus vulgaris). Arch Latinoam Nutr 1972;22:267-81.
9. Kakade ML, Simon N, Liener E. An evaluation of natural vs. synthetic subtrates for measuring the antitryptic activity of soy bean samples. Cereal Chem 1969;46:518-21.
10. Navarro L, Abreu M, González T, Izquierdo L. Método in vivo para determinar la fracción indigerible (fibra dietética) que contiene una dieta semisintética suministrada a ratas. Rev Cubana Aliment Nutr 1988;2:102-10.
11. FAO. Evaluación de la calidad de las proteínas. Estudio FAO, Alimentación y Nutrición No. 51,1992.
12. Pellet PL, Young VR eds. Nutritional evaluations of protein foods. Tokyo: The United Nations University, 1980.
13. Matthews DE, Fawell VT. Estadística Médica: aplicación e interpretación. Barcelona: Salvat, 1992.
14. Saunders RM, Hantala BS. Relationship among crude fiber, neutral detergent fiber, in vitro dietary fiber and in vivo (rats) dietary fiber in wheat foods. Am J Clin Nutr 1979;31:1188-91.
15. Abreu M. Los polifenoles en los alimentos y sus efectos nutricionales. Rev Ciencias Biol 1987;18: 105-11.
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18. Pusztai A. Constraints on the nutritional utilization of plant proteins. Nutr Abs Rev (Series B) 1985;55:363-9.
19. Bach KE. Digestibility of energy, protein, fat and nonstarch polysaccharides in mixed diets: comparative studies between man and rat. Br J Nutr 1994;71:471-87.
20. Abreu M, Hernández M, Castillo A. Study on the complementary effect between the proteins of wheat and amaranth. Die Nahrung 1994;38:82-6.

Recibido: 18 de enero de 1995. Aprobado: 10 de marzo de 1995.
Lic. Mario Abreu Peñate. Instituto de Nutrición e Higiene de los Alimentos. Infanta No. 1158, municipio Centro Habana, Ciudad de La Habana 10300,Cuba.

Recopilación:
Edith y Enrique

Amaranto: Nuestro Alimento del Futuro


México D.F. domingo 19 de abril de 2009
C-04-04
AMARANTO: NUESTRO ALIMENTO DEL FUTURO

Actualmente la mayoría de la población mundial recibe el grueso de sus requerimientos proteicos y calorías de 20 especies vegetales únicamente, en especial de los cereales como el trigo, el arroz, el mijo y el sorgo; tubérculos como la papa, el camote y la cassava; leguminosas como el frijol, el cacahuate y la soya, y otros alimentos, como la caña de azúcar, el betabel y el plátano.

Conscientes de la conveniencia imperiosa de diversificar la base alimentaria tanto en una escala global como a nivel individual, la Academia Nacional de Ciencias de los Estados Unidos realizó un estudio extensivo para precisar los cultivos óptimos para su desarrollo y diseminación. El resultado, publicado en 1975 en un estudio titulado "Plantas tropicales subexplotadas con valor económico prometedor", seleccionó al amaranto dentro de los 36 cultivos más prometedores del mundo, determinando que "el amaranto es un buen alimento de origen vegetal para consumo humano".

Desde entonces se han realizado exhaustivas investigaciones sobre el amaranto, confirmando su enorme potencial como alimento de alta calidad.

En las épocas precolombinas el grano de amaranto era uno de los alimentos básicos, casi tan importante como el maíz y el frijol. Miles de hectáreas de tierras aztecas, incas y de otras culturas, se encontraban cultivadas con estas hermosas plantas altas y rojizas. Antes de la conquista, 17 provincias mandaban más de 20,000 toneladas de grano de amaranto a la antigua Tenochtitlan (hoy la Ciudad de México), en tributo anual al emperador azteca Moctezuma.

El amaranto se entrelazaba con los rituales: en varias fechas del calendario religioso las mujeres aztecas molían la semilla, la mezclaban con miel y formaban figuras de víboras, aves, montañas, venados y dioses, para ser comidas en las ceremonias, en los grandes templos o en pequeñas reuniones familiares.

Aparentemente, el uso del amaranto en los rituales espantó a los conquistadores españoles y con el colapso de las culturas indias después de la conquista, el amaranto cayó en el olvido. En América sobrevivió sólo en pequeñas áreas de cultivo esparcidas en zonas montañosas de México y los Andes.

El maíz y el frijol (nativos de nuestro continente) se convirtieron en dos de los cultivos principales que alimentan al mundo, mientras que el amaranto pasó a la oscuridad. La conquista española terminó con el uso del amaranto como un artículo de primera necesidad en América. La diseminación de este alimento altamente nutritivo en la agricultura mundial tuvo que esperar a su "descubrimiento" por la ciencia del siglo xx.

El Amaranto Como Alimento de Alta Calidad

Los amarantos son plantas de hoja ancha, siendo de los pocos no pastos que producen cantidades significativas de grano de cereal comestible. Por este motivo, el amaranto también se conoce como seudocereal para distinguirlo de los pastos que producen grano. El amaranto crece vigorosamente; resiste sequías, calor y plagas; y se adapta fácilmente a nuevas tierras y ambientes.

El amaranto es un bello cultivo, de hojas brillantemente coloreadas y flores violetas, anaranjadas, rojas y doradas. Las panojas, algunas de hasta 50 cm de largo, se parecen a las del sorgo. Las semillas, aunque apenas más grandes que una semilla de mostaza (0.9-1.7 mm de diámetro), se producen en cantidades masivas.

Con un contenido de proteína cercano al 16 por ciento, la semilla de amaranto se compara muy favorablemente con las otras variedades convencionales de trigo (12-14%), arroz (7-10%), maíz (9-10%) y otros cereales de consumo común.

Es más, con el amaranto no sólo es cuestión de cantidad; su proteína es también sobresaliente y excepcional en cuanto a su calidad. Es muy alta en el contenido de lisina, un aminoácido esencial. Los cereales (maíz, trigo, avena, etc.) son considerados no balanceados en términos de su composición de aminoácidos, ya que precisamente les hace falta mayor cantidad de lisina para dar una alimentación óptima.

Las proteínas del amaranto, sin embargo, tienen casi el doble del contenido de lisina que el trigo, tres veces más que el maíz y tanta como se encuentra en la leche, el estándar de excelencia nutricional. El amaranto es, por lo tanto, un complemento nutricional óptimo para los cereales convencionales.

Hace tiempo, el amaranto fue un alimento para los dioses, envuelto en el velo del ritual y reservado para la élite. Que sea hoy un alimento de calidad para todos: su único ritual, la agradable costumbre de una familia que se sienta a compartir su comida diaria.

Cosecha de Amaranto

El amaranto es una valiosa planta de nuestros antepasados. Antes de la llegada de los españoles, el amaranto se comía todos los días junto con el maíz y el frijol.

Debemos recuperar este gran tesoro perdido durante la conquista.

A la semilla de amaranto se le conoce también como "alegría"

Por sus ricas propiedades, además de ser una gran herencia de nuestro pasado indígena, el amaranto está llamado a convertirse en el alimento del futuro, por lo que fué seleccionado para cultivarse en el espacio como alimento de los astronautas.

El cultivo de amaranto es una alternativa para tus terrenos de temporal por las siguientes razones:
* Puedes sembrarlo con toda confianza en tu pueblo porque se adapta a diferentes suelos y climas.
* Puedes sembrarlo de temporal porque es más resistente a la sequía que el mismo maíz.
* Obtienes muchos beneficios, desde antes de la cosecha, consumiendo la hoja como verdura, durante todos los meses de crecimiento de la planta.
* También puedes usar la hoja para completar la comida de chivos, borregos, vacas y gallinas.
* El rastrojo que queda después de la cosecha lo puedes usar como forraje para los animales.
* El amaranto te da buenas ganancias porque el precio es mucho más alto que el de otros granos, incluyendo al frijol.
* Tiene un mercado asegurado, evitando problemas de comercialización.

El Amaranto Tiene un Alto Valor Alimenticio:

La hoja de amaranto sabe más sabrosa que el quelite y es muy nutritiva.
La hoja tiene más hierro que la espinaca. El hierro ayuda a prevenir la anemia, en especial en los niños y mujeres embarazadas o que están amamantando bebés.
Contiene calcio que previene la enfermedad del debilitamiento de los huesos (osteoporosis).
Contiene proteínas que ayudan al crecimiento. Las proteínas son muy importantes en los niños, desde el seno materno hasta los 3 años, porque ayudan a la buena formación del cerebro.

La semilla tiene un alto contenido de proteínas, vitaminas y minerales que nos ayudan a crecer sanos y fuertes.

La semilla de amaranto tiene más proteínas que la leche.

Para conocer la planta conviene que el primer año siembres 24 matas, de tres plantas cada una, en el patio de tu casa. Con eso alcanza para que una familia de 6 personas pueda comer verdura todo el ciclo.

Para no dañar a la planta, debemos cortar de 3 a 4 hojas a cada una y dejarla descansar de 15 a 20 días antes de volver a cortar.

A los seis meses cosechamos el grano.
Los almácigos de amaranto deben sembrarse del 25 de mayo al 22 de junio.
Nuestro método de cultivo te permite:
* Sembrar el amaranto en regiones con poca lluvia.
* Reducir al mínimo el riesgo de que el cultivo se marchite si las lluvias escasean o se presentan en forma muy irregular.
* Sembrar con poca inversión.
* Utilizar terrenos pequeños.
* Tener buena producción de semilla.
* Alternativas y Procesos de Participación Social A.C. apoya a campesinos con tierras de temporal con los siguientes servicios.
Paquete de siembra
Capacitación y asistencia técnica
Cursos de cocina con amaranto.
Compra del grano a precio justo.
Las familias de campesinos que siembran amaranto pueden formar parte de las cooperativas del grupo Quali para participar de los beneficios de la transformación agroindustrial y de la comercialización de los productos de amaranto Quali.

EL AMARANTO: NUEVAS TECNOLOGÍAS PARA UN ANTIGUO CULTIVO

Rosalba Becerra. El amaranto se cultivaba en América desde hace 5 000 a 7 000 años, probablemente los primeros en utilizarlo como un cultivo altamente productivo fueron los mayas, de quienes otros pueblos de América, entre ellos los aztecas y los incas aprendieron su consumo. Cuando los españoles llegaron a América, el amaranto o huautli era uno de los granos más apreciados por los aztecas. Se estima que ellos producían de 15 a 20 000 toneladas por año y, además formaba parte de los tributos que cobraban a los pueblos sometidos. Con la llegada de los europeos a América se inició un intenso intercambio de cultivos en el que algunos de éstos cobraron mayor importancia mientras que otros llegaron casi a desaparecer. El éxito o fracaso de un cultivo, sin embargo, no depende necesariamente de sus características intrínsecas; en gran medida su uso está sujeto a las condiciones sociales y culturales, que van cambiando a lo largo de su historia. El amaranto tiene una historia singular.

El consumo de huautli estaba muy arraigado entre los aztecas. Era considerado un alimento ritual, que se utilizaba en la elaboración de diversos alimentos como atoles, tamales, pinole y tortillas, y sus hojas se consumían también como verdura. Diversas fuentes históricas relatan el uso de esta planta en las ceremonias religiosas. Con los granos del amaranto se preparaba una harina que se mezclaba con miel de maguey para formar una masa llamada tzoalli, con la que se elaboraban figuras e imágenes de deidades utilizadas en diferentes cultos (algunas fuentes mencionan que esta masa contenia también sangre de niños o adultos sacrificados). Sahagún escribe en la Historia general de las cosas de la Nueva España:"…hacían unas imágenes de tzoatlli [sic] en forma humana, con ciertos colores pintados, las cuales llamaron "tapictoton"; al acabar la fiesta dividían entre si las imágenes y comíanlas…" Los españoles asociaron esto con la ceremonia de la eucaristía del cristianismo y, como muchos otras costumbres, el consumo de figuras de tzoalli se prohibió y se persiguió a quienes lo seguían practicando. Este hecho, aunado a otros motivos más como la sustitución de los cultivos nativos por los introducidos del Viejo Mundo y que eran preferidos por los españoles, actuaron de manera conjunta para reducir el cultivo del amaranto de manera drástica.

Afortunadamente el arraigo de las costumbres en los pueblos es muy fuerte y el consumo del amaranto se mantuvo durante siglos gracias a la acción de pequeños agricultores que conservaron la tradición de su cultivo aunque en pequeña escala. Actualmente, la forma más común de consumir el amaranto en México es en el popular dulce "alegría", cuya preparación, curiosamente, deriva del antiguo tzoalli, con la diferencia de que en lugar de harina de amaranto se utilizan las semillas reventadas. En menor escala, y de manera más localizada, las semillas son molidas y mezcladas con maíz para la preparación de tamales, atoles y pinole. Otra forma de consumo tradicional es en forma de verdura. Diversos estudios realizados por la doctora Cristina Mapes, del Jardín Botánico de la UNAM, demuestran que el consumo de "quintoniles" (nombre que se da a las hojas comestibles del amaranto) es muy alto entre la población campesina de algunas regiones del centro del país y forma parte importante de su dieta.

La producción de alimentos en México y en el mundo enfrenta una problemática muy compleja. Por una parte el aumento de la población impone nuevos retos para la producción; por otra, los cambios en los patrones culturales y la tecnificación de la agricultura han llevado a la reducción del espectro de los recursos vegetales utilizados en la alimentación del hombre. En este contexto el amaranto ha capturado el interés de quienes se han dado a la tarea de recuperar y revalorar algunos cultivos que por diferentes razones han caído en el olvido y que tienen un prometedor potencial de explotación. ¿Cuáles son las características que han hecho del amaranto un recurso tan atractivo?

Una de las características más importantes del amaranto es, sin duda, su alto valor nutritivo. Los amarantos, además, se pueden aprovechar de múltiples formas, como grano, como verdura o como forraje. Es también un cultivo altamente eficiente que puede prosperar en condiciones agroclimáticas adversas, tales como sequía, altas temperaturas y suelos salinos. La semilla presenta una gran versatilidad, pudiéndose utilizar en la preparación de diversos alimentos y tiene, además, un prometedor potencial de aplicación industrial, tanto en la industria de los alimentos como en la elaboración de cosméticos, colorantes y hasta plásticos biodegradables.

Técnicamente el grano de amaranto es considerado como un pseudocereal, ya que tiene características similares a las de los granos de cereales verdaderos de las monocotiledóneas. Al igual que éstos, contiene cantidades importantes de almidón, con la diferencia de que éste se encuentra almacenado en el perispermo y el embrión ocupa gran parte del grano, conformando así una buena fuente de lípidos y también de proteínas. Sin embargo, por ser una dicotiledónea, no es considerado como un cereal verdadero. Es importante señalar que estas caracteristicas de su estructura son importantes en la determinación de las tecnologías a utilizar en el procesamiento del grano.

Diversos autores han reportado contenidos de proteína en amaranto que van de 15 a 17%, pero su importancia no radica sólo en la cantidad sino en la calidad de la proteína, ya que presenta un excelente balance de aminoácidos. Por su composición, la proteína del amaranto se asemeja a la de la leche y se acerca mucho a la proteína ideal propuesta por la fao para la alimentación humana. Tiene un contenido importante de lisina, aminoácido esencial en la alimentación humana y que comúnmente es más limitante en otros cereales.

El almidón es el componente principal en la semilla del amaranto, pues representa entre 50 y 60% de su peso seco. El almidón del amaranto posee dos características distintivas que lo hacen muy prometedor en la industria: tiene propiedades aglutinantes inusuales y el tamaño de la molécula es muy pequeño (aproximadamente un décimo del tamaño del almidón del maíz). Estas características se pueden aprovechar para espesar o pulverizar ciertos alimentos o para imitar la consistencia de la grasa.

El contenido de lípidos va de 7 a 8%. Estudios recientes han encontrado un contenido relativamente alto de escualeno (aprox. 8% del aceite de la semilla). El escualeno es un excelente aceite para la piel, lubricante y precursor del colesterol que se obtiene comúnmente de animales como la ballena y el tiburón.

El valor nutritivo de las hojas de amaranto ha sido también ampliamente estudiado. Se ha encontrado que la hoja contiene altos valores de calcio, hierro, fósforo y magnesio, así como ácido ascórbico, vitamina A y fibra. El cultivo de amaranto para verdura requiere mayor humedad, ya que se ha observado que bajo condiciones de estrés hídrico las hojas contienen altos niveles de oxalatos y nitratos, que pueden tener efectos adversos para la nutrición humana. No obstante, al hervir las hojas la concentración de estos compuestos disminuye.

Existen notables diferencias entre las especies productoras de grano y las de verdura. Las plantas que se utilizan por su grano y que han sido también utilizadas como ornamento y como colorante, son generalmente especies cultivadas. El proceso de domesticación de estas especies las ha llevado a alcanzar mayores tallas, con inflorescencias enormes y con mayor producción de semillas. Por otra parte, las especies productoras de verdura son generalmente malezas, plantas no cultivadas que dedican gran parte de su energía a la producción de follaje, son de menor tamaño que las cultivadas y presentan flores y frutos más pequeños y de color oscuro.

En las últimas décadas el cultivo del amaranto se ha difundido de manera exponencial en varios países del mundo. India es uno de los países que ha adoptado el amaranto más decididamente. La gran cantidad y variedad de platillos preparados con semilla y con hojas de amaranto que encontramos en la comida hindú, nos demuestran el arraigo que éste tiene entre la población. Hoy día, India es uno de los principales productores de amaranto en el mundo y se ha convertido en un centro secundario de diversificación. En el National Bureau of Plant Genetic Resources, en Shimla, se encuentra el segundo banco de germoplasma de amaranto más importante del mundo. En 1995 la colección constaba de 3 000 registros.

Aunque el amaranto llegó a China hace más de cien años, el impulso que el gobierno chino le ha dado en los últimos quince años lo ha convertido en un cultivo invaluable. Las más de 30 variedades traídas del banco de germoplasma del Rodale Center de Estados Unidos han prosperado extraordinariamente en suelos salinos y con problemas de irrigación. Actualmente los chinos consumen gran cantidad de hojas de amaranto, preparan fideos, panqués y duces con la semilla, utilizan el colorante para la salsa de soya y recientemente se ha explotado como forraje para cerdos, pollos, patos, conejos, caballos y peces con excelentes resultados. Se considera que China es actualmente el país en donde se cultiva la mayor extensión de amaranto: en 1998 se sembraron 150 000 ha, y actualmente los chinos ya cuentan con una importante colección de germoplasma localizada en el Institute of Crop Germplasm Resources, en Beijing. En otros países de Asia y África las diferentes especies de Amaranthus son utilizadas fundamentalmente como verduras en la preparación de muy variados platillos.

En Estados Unidos el interés por el amaranto se incrementó a mediados de la década de los 70 con la creación de la Rodale Fundation y el Rodale Research Center, ambos fundados por Robert Rodale. Aunque la extensión de amaranto sembrada en este país no ha alcanzado grandes dimensiones, el interés por el producto ha ido en aumento y actualmente Estados Unidos, junto con Japón, se encuentra a la vanguardia en la investigación, tanto desde el punto de vista agronómico como en el desarrollo de nuevas tecnologías para el uso del grano en productos novedosos. En Iowa, en el North Central Regional Plant Introduction Station, se encuentra la colección de germoplasma de amaranto más importante del mundo, que en 1999 ya contaba con 3 380 registros de variedades provenientes de todo el mundo.

Al igual que en México, el consumo del amaranto en Perú es una tradición milenaria que decayó por mucho tiempo; sin embargo en años recientes se ha dado un nuevo a la investigación de la planta y a su reintroducción. Perú cuenta con dos de las colecciones de germoplasma de amaranto más importantes del mundo y es el país donde se han logrado los mayores rendimientos. En algunos campos experimentales se han alcanzado a producir hasta 7 200 kg/ha de grano, significativamente mayor que el promedio mundial que va de los 1 000 a los 3 000 kg/ha.

La nueva valoración que ha tenido el amaranto en el mundo también despertó el interés de agrónomos e investigadores mexicanos. En la década de los 80 el impulso a la producción del grano llegó a elevar la superficie sembrada de 500 ha en 1983 a 1 500 en 1986. Diversas instituciones nacionales como el Colegio de Posgraduados de Chapingo, el Instituto Nacional de la Nutrición, el Instituto Nacional de Investigaciones Forestales y Agropecuarias , la Universidad Nacional Autónoma de México, el Instituto Politécnico Nacional, la Universidad Autónoma Metropolitana, la Universidad Autónoma Chapingo y el Instituto Nacional de Antropología e Historia, entre otras, han apoyado trabajos de investigación de muy diversa índole que han contribuido a aumentar nuestro conocimiento y las potencialidades de tan importante recurso. Actualmente en el inifap se encuentra un importante banco de germoplasma; en 1993 este banco contaba con 495 registros. Sin embargo el apoyo para el cultivo y la investigación del amaranto parece haber disminuido durante la última década. Según datos de la Sagar, en 1997 se sembraron 817 ha de amaranto, y se obtuvo una producción de 989 ton.

Con la aplicación de procesos modernos de tecnología de alimentos se ha dado un nuevo enfoque a la explotación del amaranto. Con estas técnicas se pretende utilizar la planta como fuente de materias primas tales como proteínas, carbohidratos y fibras que sirvan como base para la fabricación de nuevos alimentos. En este sentido, el Dr. Jorge Soriano Santos, investigador del departamento de Biotecnología de la División de Ciencias Biológicas y de la Salud de la uam Iztpalapa, ha iniciado una línea de investigación cuyo propósito es el desarrollo de nuevos productos que contienen como base amaranto.

Se han desarrollado, por ejemplo, técnicas para extraer concentrados proteínicos de alto valor que pueden ser usados en la elaboración de diversos alimentos para elevar su valor nutritivo. Estos concentrados pueden sustituir la proteína de la soya que se utiliza en la elaboración de muchos productos que hoy día ya son populares. Un uso novedoso que se ha dado a estos extractos es en la elaboración de mayonesas y aderezos "light": aprovechando las características aglutinantes del grano se sustituye la grasa que comúnmente contienen dichos aderezos por el extracto proteínico de amaranto, que da la consistencia al producto.

Otro producto que se encuentra en desarrollo es una bebida de amaranto a la que, por sus propiedades nutritivas semejantes a las de la leche, le llaman "leche de amaranto". Esta bebida representa una opción viable y más económica para personas que presentan intolerancia a la leche. Promover su consumo, sobre todo entre la población infantil ayudaría a elevar el nivel nutricional de la población, sobre todo la de escasos recursos.

En este impulso a la industrialización del amaranto no sólo se ha puesto atención al grano, ya que también las hojas pueden ser aprovechadas. Otro proyecto dirigido por el Dr. Soriano es el desarrollo de una bebida de fibra dietética y laxante a partir de las hojas de amaranto. Los productos que se encuentran hasta ahora en el mercado son elaborados con Psyllium plantago, una planta que no se produce en México y que para la elaboración de estos laxantes se importa de la India. La bebida preparada con las hojas de amaranto resulta hasta 40% más barata que las que actualmente se encuentran en el mercado.

Sin embargo, el futuro del amaranto en México es aún incierto. Algunas industrias nacionales empiezan a interesarse en comprar las nuevas tecnologías para la elaboración de productos de amaranto, pero la producción en el país no alcanza los niveles suficientes para impulsar una industrialización de grandes alcances. Por otra parte, los productores siembran pequeñas cantidades de amaranto por que no existe demanda del grano. Y en este círculo vicioso el mercado aún se encuentra restringido a un pequeño y selecto número de consumidores que pueden adquirir alimentos naturales y nutritivos a pesar de su alto costo.

El desarrollo de nuevos productos debe ir a la par con las investigaciones encaminadas al mejoramiento de los sistemas de cultivo y el apoyo a los productores. Las plantas cultivadas de manera tradicional por los campesinos de América y particularmente de México representan el remanente de la gran diversidad que existía en tiempos prehispánicos. Este germoplasma constituye también el punto de partida para lograr el rescate de este antiguo y valioso cultivo.

Bibliografía

Barros, C. y M. Buenrostro. Amaranto, fuente maravillosa de sabor y salud. Grijalbo, México, 1997.
Brenner, E.M., D.D. Baltensperger, P.A. Kulakow, J.W. Lehmann, R.L. Myers, M.M. Slabert y B.B. Sleugh. Genetic resources and breeding of Amaranthus. Plant Breeding Reviews. (En prensa).
Espitia, R.E. Breeding of grain amaranth. En: O. Paredes-López (ed.), Amaranth. Biology, Chemistry and Technology. crc Press, Boca Ratón. Ann Arbor. Londres, 1994.
Itúrbide, G.A. y M. Gispert. Amarantos de grano (Amaranthus spp.). En: J.E. Hernández-Bermejo y J. León (eds.), Cultivos marginados, otra perspectiva de 1492. fao, Roma, 1992.
Mapes, C., J. Caballero, E. Espitia y R. Bye. Morphophysiological variation in some Mexican species of vegetable Amaranthus: Evolutionary tendencies under domestication. Journal of Genetic Resources and Crop Evolution 43:283-290, 1996.
Paredes-López, O., A.P. Barba de la Rosa, D. Hernández y A. Carabez. Amaranto. Características alimentarias y aprovechamiento agroindustrial. Secretaría General de la Organización de los Estados Americanos. Programa Regional de Desarrollo Científico y Tecnológico. Washington, D.C. (s/f).
Schnetzeler, K.A. y W. M. Breene. Food uses and amaranth product research: A comprehensive review. En: O. Paredes-López (ed.), Amaranth. Biology, Chemistry and Technology. CRC Press, Boca Ratón. Ann Arbor. Londres, 1994.

Variabilidad de Especies del Género Amaranthus

La familia Amaranthaceae se compone de 60 géneros y alrededor de 800 especies, 60 de estas especies son cosmpólitas y crecen particularmente en sitios perturbados por el hombre considerandose como malezas.

Existe una amplia variabilidad en las diferentes especies del género. Solo tres de ellas son cultivadas: Amaranthus hipochondriacus, originario de México, A. cruentus, originario de Guatemala y el sureste de México y A. caudatus, cuyo origen es América del Sur. Asociadas a éstas existen tres especies de malezas o arvenses: A powelli, A hybridus y A. quitensis, de éstas solo una—A. hybridus— se encuentra ampliamente distribuída por todo el mundo.

Con base en sus características morfológicas tales como la altura de la planta, tamaño de la inflorescencia, patrón de ramificación y patrones fenológicos como tiempo de floración y maduración, sen han descrito diferentes tipos de amarantos de grano. Los distintos tipos representan complejos adaptativos a diferentes localidades bajo condiciones ambientales y culturales diferentes. Espitia (1994) considera que la designación más adecuada para estos tipos es la de razas, ya que cada una tiene una distribución definida y ha sido desarrollada bajo condiciones agroclimáticas distintas, lo cual las ha llevado a evolucionar por diferentes caminos.

Las razas más importantes desarrolladas en México son: Mexicana, Guatemalteca, Azteca, Mercado y Mixteca. Otras razas importantes desarrolladas en otros países son: Africana, Nepal, Picos, Sudamericana y Edulis. Cabe señalar que no todas las poblaciones coinciden completamente con las características de una raza o tipo, pues existe una gran hibridización entre ellas.

Recopilación:
Edith y Enrique

Lectinas de Semillas de Amaranto













México D.F. viernes 17 de abril de 2009
C-04-03


PURIFICACION Y CARACTERIZACION DE LECTINAS DE SEMILLAS AMARANTO CULTIVADO EN EL ESTADO DE HIDALGO

Julia Dolores Salgado Telpalo, Maria del Carmen Valadez Vega
Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo, Instituto de Ciencias de la Salud
Palabras clave: lectinas, amaranto, eritrocitos



Introducción. El amaranto es un pseudocereal con un muy
alto valor nutritivo por su alto contenido de proteínas,
aminoácidos y minerales (1), sin embargo puede contener
factores antinutricionales que interfieren negativamente, en la
absorción y metabolismo de sustancias nutritivas (2). Uno de
los factores antifisiológicos más estudiados son las lectinas
que son glicoproteínas, de origen no inmunológico, que se
caracterizan por ligar carbohidratos o glicoconjugados con
alta especificidad, uniéndose de manera reversible sin alterar
su estructura covalente (3). Las lectinas despiertan gran
interés científico debido al gran potencial que poseen cuando
se utilizan de forma pura en reacciones biológicas para fines
de diagnósticos clínicos e investigaciones de estructura de
proteínas y carbohidratos en células pudiendo obtener
diversos tratamientos alternativos a enfermedades como lo es
el cáncer.

El objetivo del presente trabajo fue la extracción, purificación
y caracterización bioquímica y fisicoquímica de lectinas de
semillas de amaranto cultivado en el Estado de Hidalgo.

Metodología. La extracción de la lectina se realizo mediante
la metodología reportada por Mejía y col, 1989. La
purificación de la lectina se llevo a cabo mediante
cromatografía de afinidad utilizando una matriz de estroma de
eritrocitos humanos. La lectina purificada se caracterizó
mediante su actividad hemaglutinante utilizando eritrocitos
humanos y de animales (4), estudios de inhibición de la
aglutinación, determinación de peso molecular mediante
electroforesis nativa y desnaturalizante, contenido de
carbohidratos totales (5), determinación de metales, efecto de
iones metálicos sobre la hemaglutinación, estabilidad al pH y
termoestabilidad.

Resultados y discusión. La lectina fue purificada
presentando un solo pico después de ser eluido con ácido
acético. La lectina de amaranto es una glicoproteína (3.69 %
carbohidratos totales). Esta compuesta por dos subunidades
con un peso molecular de 26.68 y 28.43 kDa. Es una
metaloproteína que contiene y biológica iones iones

(Cuadro 1 , solo se encuentra en el original)

Ca2+, Mg2+, Mn2+, Cu2+ y Zn2+. La lectina presenta mayor
especificidad hacia eritrocitos humanos tipo O tripsinizados y
sin tripsinizar; lo que se indica que es una lectina específica
para la fucosa que es un carbohidrato presente en la
membrana de los eritrocitos. Asimismo, es más afín hacia
eritrocitos de hámster y de conejo. Presenta inhibición de la
aglutinación cuando es tratada con monosacáridos; es muy
estable a pH 6.0, 7.0, 7.5 y 8.0; y presenta una alta estabilidad
y actividad biológica a temperaturas entre 25-60ºC ya que a
temperaturas mayores la actividad hemaglutinante disminuye
considerablemente debido a la desnaturalización de las
proteínas.

(Fig. 1. Estabilidad de la lectina AM a diferentes condiciones de
pH(izq) y temperatura (der), solo se encuentra en el original).

Conclusiones. Hoy en día es interesante conocer más acerca
de la función e identificación de lectinas, por lo que en el
presente trabajo se realizó la purificación y caracterización de
lectinas de semillas de amaranto cultivado en el Estado de
Hidalgo con la finalidad de encontrar una fuente potencial de
estas proteínas para su utilización posterior en estudios
biológicos.

Agradecimiento. Agradecemos a la Universidad Autónoma
del Estado de Hidalgo y al Instituto Nacional de Pediatría por
las facilidades otorgadas

Bibliografía. 1. Lehmann, J. 1991. The industrialization and
commercialization of Amaranth an alternate approach. In: Primer
Congreso Internacional del Amaranto. Oaxtepec, Morelos. México.
Septiembre 22-27.
2. Valle, P. Lucas B. 2000. Toxicología de alimentos. Documento
publicado en Inst Nac Sal Pub. 219-222.
3. Rini, J. 1995. Lectin structure. Annu. Rev. Biomol. Struct. 24:
551-77.
4. Jaffé, W. 1980. Hemagglutinin. ln: Toxic constituents of plant
foodstuff. Ed. by lE. Liener. New York, U.S.A., Academic Press. 73-
102.
5. Dubois, M., Gilles, K., Hamilton, J., Rebers, A., Smith, F.
1956. Colorimetric method for determination of sugars and
related substances. Anal Chem. 28: 350-356.

Recopilación
Edith y Enrique

domingo, 12 de abril de 2009

Albúminas de Amaranto


México D.F. a domingo 12 de abril de 2009
C-04-02


ESTUDIO DE LAS PROPIEDADES FUNCIONALES DE ALBÚMINAS DE AMARANTO

RESUMEN


Las albúminas son la fracción principal de las proteínas de reserva en amaranto, son solubles en agua y en soluciones de baja fuerza iónica, su recuperación varía del 49 al 65% según el procedimiento de extracción. En esta fracción se ha encontrado un grupo de proteínas ricas en metionina conocidas como 2MPRS; también contiene altas concentraciones de lisina, representado casi el doble de lo encontrado en algunos cereales como el maíz y el trigo, y un poco menos de lo encontrado en algunas leguminosas importantes como chícharo, frijol y soya. El objetivo de este trabajo consistió en extraer las albúminas de amaranto, estudiar las propiedades funcionales y reológicas de estos aislados y observar su funcionalidad en la elaboración de pan blanco. Se trabajó con dos variedades diferentes de amaranto: Tlaxcala y San José. El grano se limpió, y se molió hasta obtener una harina de malla No. 80; la harina se desengrasó con hexano. La extracción de las albúminas se realizó en agua y una solución de NaCl 0.04 M. Los aislados obtenidos fueron liofilizados. Las propiedades funcionales evaluadas fueron solubilidad, absorción de agua y aceite, capacidad de espumación y capacidad de emulsificación, todas ellas probadas a en un rango de pH de 3 a 9. Los resultados mostraron que los aislados de albúminas presentan un perfil de solubilidad diferente al de las globulinas, pero muy similar al de albúminas de huevo, la menor solubilidad de albúminas se encontró a pH ácidos. Las albúminas de amaranto mostraron excelente capacidad de absorción de agua y aceite, espumación y emulsificación, siendo máximas estas propiedades a un de pH 5, lo que sugiere que estas proteínas deberían usarse en la preparación de alimentos ácidos. Los farinogramas mostraron que la harina de trigo suplementada con 1% de albúminas de amaranto (1%) mejora considerablemente el tiempo de mezclado y estabilidad de la masa. La relación P/L de los alveogramas sugiere que la harina de trigo con albúminas mejora la calidad de masa para la elaboración del pan. Finalmente el pan obtenido muestra una mejora la estructura de la miga y el volumen del pan, el sabor, olor y color no se ve afectado por la adición de proteínas. Estos resultados sugieren que las albúminas de amaranto tienen mejor funcionalidad a pH´s ácidos y que podrían ser utilizadas en lugar de albúminas de huevo.

INTRODUCCIÓN Y ANTECEDENTES

El amaranto es un grano que debido a sus sobresalientes características nutricionales y su gran versatilidad como alimento tiene un alto potencial como ingrediente. En México el grano se consume principalmente en forma de “alegrías” (amaranto reventado o tostado mezclado con miel o piloncillo). En algunas regiones del país la semilla se usa en la elaboración de alimentos típicos como pinole, tamales y atole (Sánchez-Marroquín, 1980), sin embargo se requieren nuevas aplicaciones para incrementar su utilización en virtud de que su consumo sigue siendo bajo. Una alternativa interesante de utilización de amaranto ha sido la separación de sus componentes principales: proteínas y almidón (Barba de la Rosa y col., 1989). Dentro de las fracciones de proteína, las albúminas y las globulinas son las que más se conocen. Las albúminas son proteínas solubles en agua o en soluciones de baja fuerza iónica y representan la fracción principal del grano de amaranto, el porcentaje varía del 49 al 65% dependiendo del procedimiento de extracción utilizado (Segura-Nieto y col., 1994). Las globulinas han sido estudiadas más ampliamente, reportándose que esta fracción está compuesta por las fracciones 11S y 7S (Konishi y col., 1985). Se sabe que las globulinas 11S son las que imparten la funcionalidad en los alimentos que las contienen, las más conocidas son las proteínas de soya y de aquí la gran versatilidad de productos que se producen a partir de esta leguminosa (Peng y col., 1984). La fracción 7S es la proteína principal de granos como el frijol y el chícharo (Gueguen y Barbot, 1988; Marcone y Yada, 1991). A pesar de que existen varios reportes de las características fisicoquímicas de las proteínas de amaranto (Konishi y col., 1985; Barba de la Rosa y col., 1992b; Segura-Nieto y col., 1992), se tiene poca información acerca de sus propiedades funcionales (Konishi y Yosimoto, 1989; Marcone y Kakuda, 1999) y nada o muy poco se conoce acerca de estas propiedades de la fracción principal, las albúminas. El conocimiento de las propiedades funcionales de la fracción mayoritaria de proteínas en un grano es de gran importancia para poder llevar a cabo un mejor manejo y darle usos más adecuados, con esto se pretende lograr una mejor comercialización del grano de amaranto.

OBJETIVOS

1. Obtener los aislados de la fracción de albúminas de amaranto.
2. Evaluar las principales propiedades como son solubilidad, absorción de agua y aceite, espumación y emulsificación de los aislados de albúminas de amaranto.
3. Estudiar el comportamiento reológico de la mezcla harina de trigo suplementada con albúminas de amaranto.
4. Determinar la funcionalidad de los aislados en la preparación de pan blanco.

JUSTIFICACIÓN E IMPORTANCIA

La utilización de aditivos en la industria alimentaria que impartan características y estabilidad en los alimentos, es una práctica común hoy en día. Un ejemplo de esto, es el empleo de aislados de proteínas: principalmente proteínas vegetales (soya), que ayudan a realzar las características de los productos además de mejorar el valor nutritivo.

Desde años atrás, se le ha dado mucho interés al estudio de las proteínas de amaranto, especialmente la fracción globulinas por parecer prometedora en el uso funcional comparado con las proteínas de soya, sin embargo, la fracción mayoritaria de las proteínas de amaranto es las albúminas, fracción que a la fecha no se ha determinado sus propiedades funcionales. También cabe hacer notar, que en esta fracción, albúminas, se encuentran proteínas ricas en metionina y proteínas con el mayor contenido de lisina, además es la fracción donde se encuentran los inhibidores de tripsina, moléculas que recientemente se han denominado como nutraceúticos por el efecto que tienen como inhibidores de cáncer.

Por esto, creemos que es de gran importancia estudiar la funcionalidad de las albúminas de amaranto para utilizarlas en la preparación de alimentos.

Recopilación:
Edith y Enrique





Amaranto Fuente de Salud



México D.F. a domingo 12 de abril de 2009
C-04-01
AMARANTO FUENTE DE SALUD

Oaxaca, México.- Una organización civil denominada Puente a la Salud Comunitaria, realiza una labor importante para mitigar la desnutrición y la prevención enfermedades que afectan a comunidades oaxaqueñas, a través del cultivo del amaranto.

El resurgimiento de un cultivo ancestral: El Amaranto

Por Rigoberto Pola López, Joshua Spetter y Katherinne Lorenz

El amaranto, que en náhuatl se llamaba huauhtli, también conocido como “Alegría” en Oaxaca, México, refiriéndose a Amaranthus sp., fue junto con el maíz, el frijol y la calabaza uno de los principales cultivos alimenticios de los mayas y aztecas. Por referencias históricas se conoce que la población consumía la hoja verde del amaranto como hortaliza y con sus granos preparaba atole, tamales, pan, tortillas y dulces. El amaranto era de gran importancia por la relación que guardaba con los ritos religiosos, que los conquistadores consideraron prácticas paganas peligrosas. El cultivo fue prohibido y literalmente desapareció, reduciéndose a lugares marginales y subsistió sólo gracias a su conservación, como estrategia alimentaria de ciertas poblaciones indígenas (Granados y López, 1990).

Fue en los años setenta que W.J. Dowton encontró en el amaranto niveles muy altos de proteína y de lisina, aminoácido esencial en la nutrición; generalmente este aminoácido es deficiente en las proteínas vegetales, incluyendo a los cereales comunes (Vietmeyer, 1986, citado por Ramírez, 1994). A raíz de esto, el amaranto cobró gran importancia a nivel mundial.

El nivel de proteína y el buen balance de los aminoácidos que contiene el amaranto lo sitúan como un alimento de calidad. Tanto la semilla, como los tallos y hojas tienen alto valor nutricional, por lo tanto, su utilización puede ser integral. Las hojas se consumen como verdura hasta antes de su floración y, si el cultivo tiene por objeto la producción de semilla, la parte vegetativa puede aprovecharse como forraje de alto valor.

El amaranto puede ayudar a combatir la anemia, debido al hierro y vitamina C que se encuentran en las hojas y las semillas. También revierte los procesos de desnutrición relacionados con el bajo consumo de alimentos ricos en proteínas, ya que contiene un balance casi perfecto de aminoácidos y tiene abundante lisina; es excelente comparado con otros alimentos de origen animal o vegetal como la carne, leche, huevo y frijol, chile y otros. Del amaranto se puede consumir la hoja que contiene más hierro que la espinaca, por lo que se recomienda para personas que padecen de cierto grado de anemia, especialmente entre mujeres y niños. Las hojas tienen vitaminas y minerales esenciales como calcio, fósforo, hierro y ácido fólico.

En América fueron tres las especies domesticadas para grano: Amaranthus caudatus en los Andes, A. cruentus en América Central y A. hypochondriacus en México (Sauer, 1977). Las especies para la producción de grano se reconocen por sus brácteas relativamente cortas y frágiles, por su alta producción de semillas, por ser plantas grandes y por el color claro de sus semillas. El cultivo se ha desarrollado desde los trópicos hasta las tierras semiáridas. Se desarrolla bien en suelos con una amplia variación de niveles de nutrientes, aunque lo hace mejor en suelos sueltos, arenosos y con contenido de humus.


Fuente de salud y armonía comunitaria

Contexto social en salud y nutrición en Oaxaca

El Estado de Oaxaca se localiza en el sur de México. Su población tiene un fuerte arraigo indígena y ha preservado su cultura y lengua. Existen 16 grupos étnicos: Zapoteco, Mixteco, Mazateco, Mixes, Chinantecos, Chatinos, Chontales, Cuicatecos, Triquis, Chocholtecas, Huaves, Zoques, Nahuas, Amuzgos, Tacuates e Ixcatecas.

La población de Oaxaca afronta serios problemas de desnutrición, especialmente en los niños y las mujeres de las comunidades rurales: la prevalencia de desnutrición de alto riesgo en niños menores de cinco años de acuerdo al indicador peso para la edad, se mantenía en 9,9 por ciento en 2005.

Proyecto Capacitación a Productores de Amaranto

Debido a la capacidad del amaranto de crecer prósperamente en el árido entorno de Oaxaca y a su alto valor nutritivo y buen precio en el mercado, su cultivo constituye una manera práctica de proporcionar una alternativa de ingresos a los productores y una fuente de alimento saludable.

El proyecto se enfoca a la siembra, producción, consumo y comercialización de la hoja y semilla de amaranto como cultivo alternativo e integral, en donde los productores y familias puedan cultivar su propio alimento, obtener hoja como verdura y semilla para alimentarse sanamente y, con ello, combatir la desnutrición en niños, adolescentes, jóvenes y adultos. Además, lograr que el cultivo sea una alternativa importante en la generación de ingresos económicos para el bienestar social de las comunidades rurales de Oaxaca.

El proyecto realiza acciones para fomentar el cultivo del amaranto, como son la implementación de un paquete tecnológico de producción bajo las condiciones agroecológicas de las comunidades –producción sustentable orgánica con énfasis en el cuidado del medio ambiente– que comprende prácticas de conservación de suelos, elaboración de compost y lombricompost, uso de insecticidas caseros para controlar plagas y enfermedades y la no quema de las parcelas. Actualmente, el amaranto constituye una de las alternativas específicas para la diversificación de cultivos que permite, a nivel comunitario, aumentar ingresos, mejorar la nutrición y la disponibilidad de esta especie. Los productores, asesorados por técnicos del proyecto se encuentran ejecutando un programa de investigación agronómica campesina para evaluar los diferentes tipos de amaranto y su adaptación en las microrregiones del Estado.

La forma de dialogar, cooperar e intervenir junto con las comunidades

La estrategia de capacitación y asesoría participativa para implementar el cultivo del amaranto nace de la necesidad y realidad local de las propias comunidades de Oaxaca, en donde Puente a la Salud Comunitaria A.C., una asociación civil sin fines de lucro, ha diagnosticado durante más de cuatro años problemas de desnutrición y promocionado alternativas productivas sustentables para cientos de productores y familias oaxaqueñas. Puente a la Salud Comunitaria interviene y colabora participativamente en las microrregiones Valles Centrales, Mixteca, Sierra Sur, Sierra Norte y el Mixe Alto.

La socialización del proyecto para su promoción y difusión se realiza en las presidencias municipales, comunidades, rancherías y agencias municipales de las microrregiones. Se participa en asambleas ejidales, comunales y municipales para su presentación con la finalidad de que sean éstas las instancias que actúen localmente y socialicen el proyecto productivo con su comunidad. Otro sector de importancia son los técnicos y promotores comunitarios, representantes de instituciones estatales, federales y las organizaciones no gubernamentales.

Comentarios finales

Desde el punto de vista nutricional y alimentario el amaranto es un alimento completo, contiene los ocho aminoácidos esenciales requeridos en la dieta diaria de una persona, así como también vitaminas y minerales. Esto es de gran importancia porque es bien sabido que la carne ocupa un lugar privilegiado en la sociedad por su contenido proteico, aunque por sus altos precios no es del alcance de la población pobre, que hace que la dieta en condiciones de pobreza y extrema pobreza sea deficiente, sobre todo en proteínas y calorías.

Desde el punto de vista productivo, el cultivo del amaranto es apropiado para aquellas regiones con agricultura dependiente de la presencia de lluvias, sobre todo para aquellas zonas donde la lluvia es escasa y mal distribuida. El amaranto representa una buena opción por sus características fisiológicas y morfológicas que le confieren resistencia a la sequía. Es un cultivo de temporal y de riego, es anual de alto rendimiento y puede asociarse con otros cultivos entre los cuales se encuentra el maíz. La planta puede superar a los cereales básicos (maíz, trigo, arroz) y otros cereales (cebada, sorgo) en rendimiento de grano y paja.

Desde el contexto enseñanza – aprendizaje, los productores parten de una perspectiva que construye nuevos conocimientos a partir de acciones constructivas. Mediante técnicas grupales de aprendizaje se busca fomentar un sistema productivo sostenible a partir de la producción orgánica del amaranto. Los productores se involucran desde un inicio, sienten que el proyecto les pertenece y que forman parte de él. En este sentido, los conocimientos generados tienen un efecto multiplicador, donde cada productor ha logrado incorporarlos a su práctica de cultivos en su parcela. El propósito de enriquecer los conocimientos y habilidades del productor mediante un proceso gradual sirve como promotor del cultivo en comunidades vecinas, lo que permite seguir fomentando el consumo y cultivo del amaranto para contar con un alimento saludable.

Recopilación:
Edith y Enrique