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sábado, 22 de enero de 2011

EL AMARANTO DERROTA AL TRANSGÉNICO MONSANTO


 
En tiempos del descubrimiento de América los españoles prohibieron el AMARANTO. Hoy lo adopta la NASA para los astronautas al margen de las multinacionales

Hay pánico entre agricultores de Estados Unidos. La transnacional de semillas transgénicas Monsanto no sabe qué hacer con el AMARANTO (kiwicha) que está acabando con sus sembrados de soja.

Esa planta tiene varios nombres anteriores a Cristóbal Colón, pero también el Latino-Amaranthus caudutus. Y desde los siglos XI y XII o antes era elemento básico de la dieta de los pueblos andinos. Así como la papa, el maíz, fríjoles y el huauzontle, pero la conquista terminó con ellos.

Ahora es el renacimiento del AMARANTO y Monsanto no tiene el poder de suprimirlo como los civilizadores de Colón. Ahora puede ser la salvación agrícola y ecológica de los pueblos andinos y otros como el mexicano.

Monsanto y multinacionales tiran la toalla

En los anchos campos, propiedad de las multinacionales de los Estados Unidos los agricultores han tenido que abandonar miles de hectáreas de soja transgénica por culpa del amaranto. Y otros miles están gravemente amenazados por ese invasor.

Este pánico se debe a una ‘mala hierba’, el AMARANTO (conocida en el Perú como kiwicha) que decidió oponerse a la transnacional Monsanto, e invadir sus predios. Esa empresa tristemente célebre por su producción y comercialización de semillas transgénicas nunca contó con un competidor ‘desleal’

En 2004 un agricultor de Atlanta comprobó que algunos brotes de AMARANTO resistían al poderoso herbicida Roundup. Los campos víctimas de esta invasora ‘mala hierba’ habían sido sembrados con granos que contenían un gen que resistía al herbicida.

Desde entonces la situación ha empeorado (o mejorado, según el ángulo desde donde se mire) y el fenómeno de la aparición del amaranto se ha extendido a Carolina del Sur y del Norte, Arkansas, Tennessee y Missouri. Según un grupo de científicos británicos del Centro para la Ecología y la Hidrología, se ha producido una transferencia de genes entre la planta modificada genéticamente y algunas hierbas indeseables como el AMARANTO.


Normalmente las malas hierbas desaparecen, pero esta vez no ha ocurrido así

Esto contradice las afirmaciones de los defensores de los organismos modificados genéticamente (OMG): es imposible una hibridación entre una planta modificada genéticamente y una planta natural no modificada. Tal cosa según los técnicos transgénicos es simplemente tan absurda como si apareciera mañana un bicho, mezcla de elefante y jirafa.

Según el genetista británico Brian Johnson, ‘ ...puede tratarse de un cruce ocurrido entre varios millones de probabilidades. Una vez creada, la nueva planta poseería una enorme ventaja selectiva y se multiplicaría rápidamente. El potente herbicida que se utiliza aquí, Roundup, a base de glifosato y de amonio, ha debido ejercer una presión enorme sobre la planta, la cual ha aumentado aún más su velocidad de adaptación’.

Así, al aparecer un gen de resistencia a los herbicidas ha dado origen a una planta híbrida surgida de un cruce entre el grano al que se supone protege y el humilde AMARANTO, al cual ahora el herbicida no puede eliminar.

Volviendo a la historia ya antigua, las virtudes de ‘la mala hierba’

Los aztecas de México cultivaban ya esta planta, muy apreciada por sus cualidades nutritivas. Tanto que la incluían en ceremonias religiosas. Se cree que fabricaban ídolos con su harina mezclada con miel y -se dice- que en ocasiones también con sangre humana. Esas mezclas las ofrecían a los dioses, como tributo.

Esa fue, según algunos historiadores, una de las razones por las que los enviados de Isabel la Católica, lo incluyeron entre los alimentos ‘diabólicos’ proscritos por los inquisidores.

Cuando los conquistadores españoles del siglo XVI consiguieron dominar el Imperio azteca, el cultivo del amaranto -y las viejas religiones- fueron silenciadas.

En la actualidad la planta está cultivándose tras un largo letargo y abandono. Ahora es de nuevo apreciada por sus propiedades nutricionales, además posee la particularidad de no contener gluten.

La semilla era conocida como Huautli, hoy AMARANTO o ALEGRÍA, alimento que era básico en aquella América, casi tan importante como el huauzontle, el maíz y el frijol.

Su cultivo se remonta a unos siete mil años. Algunos autores afirman que los mayas fueron los primeros en cultivarlo y luego poco a poco lo fueron haciendo Aztecas e Incas. Los frailes ‘evangelizadores’ de la Corte española veían con malos ojos, cualquier alimento del que no hablase la Biblia y era puesto en un Índice sobre su idoneidad como alimento.

Un cereal casi desconocido arrasa la industria alimenticia y siembra la esperanza en Latinoamérica y el Tercer Mundo

Fue por eso que Moctezuma se vio precisado a suprimir su cultivo en su Imperio y algún amigo más versado optó por ponerle nombre latino.


Los granjeros transgénicos tienen que aprender ahora de los AZTECAS

La única solución para los granjeros sería arrancar a mano las malas hierbas, lo cual no sería rentable. Y, además, volverían a reproducirse. ¿Qué pueden hacer?

Quizás podrían aprender la historia de pueblos que eran primitivos, y ni conocían términos como ‘herbicida’, ‘transgénico’, ‘genético’, etc... Pero por lo visto si conocían el valor de lo ecológico y cultivaban sus tierras como se hacía antes, de forma ‘natural’. Esto ya no es posible dadas las enormes dimensiones de los cultivos y la aparición de Monsanto, el Gran Hermano, que enseñó al agricultor a sembrar con semillas que dan el mil por uno, matan las malas hierbas gracias a los herbicidas y requieren poca mano de obra.

Ahora a muchos granjeros, al estar esas hierbas profundamente arraigadas, les es muy difícil arrancarlas. Así es que lo que hacen simplemente es abandonar las tierras.

El diario inglés The Guardian publicaba un artículo de Paul Brown que revelaba que los genes modificados de cereales habían pasado a plantas salvajes y creando un ‘SUPERGRANO’ resistente a los herbicidas, algo ‘inconcebible’ para los defensores de las semillas transgénicas.

Resulta divertido constatar que el AMARANTO o KIWICHA, considerada ahora como planta ‘diabólica’ para la agricultura genética, fuera sagrada para los incas. Cada planta produce una media de 12.000 granos al año y las hojas, más ricas en proteínas que la soja, contienen vitaminas A y C, y sales minerales.

Una teoría bastante popular afirma que el origen de la palabra Caracas proviene del nombre de esta planta, el amaranto, tal cual lo pronunciaban desde épocas prehispánicas los habitantes de la zona conocida por el mismo nombre: el valle de Caracas, el cual fue próspero gracias en parte a esa planta. Ellos la llamaban "caraca".

En México se usa el AMARANTO para fabricar atole y alegrías, que son semillas de amaranto mezcladas con miel o piloncillo (Panela).

Así este boomerang (el AMARANTO), devuelto por la naturaleza a los cultivos transgénicos para neutralizar a las multinacionales, no sólo sustituye a los depredadores, sino que se instala en sus predios con fuerza. Y se trata de una planta fértil y bella que podría alimentar a la humanidad en caso de hambre.

Soporta la mayoría de los climas, tanto las regiones secas como las zonas de monzón y las tierras altas tropicales. No tiene tampoco mayores problemas ni con los insectos ni con las enfermedades con lo que no necesita productos químicos, para proliferar... Es también un cultivo que puede prosperar en condiciones agroclimáticas adversas, tales como sequías, altas temperaturas y suelos salinos.


La semilla presenta una gran versatilidad, pudiendo utilizarse en la preparación de diversos alimentos y tiene, además, un prometedor potencial de aplicación industrial, tanto en la industria de los alimentos como en la elaboración de cosméticos, colorantes y hasta plásticos biodegradables, por su alto contenido de ácidos grasos.

Amaranto, cereal para celíacos. El cultivo de este pseudocereal se remonta a más de siete mil años en el Continente AMERICANO, en países como México, Perú, Bolivia, Venezuela... De la planta se aprovecha todo, tanto el grano como las hojas.

Al no contener gluten, y ser rico en proteínas, vitaminas y minerales, lo recomienda la medicina latinoamericana para el crecimiento, por lo que está siendo difundido en hospitales y en hogares para niños débiles especialmente en periodos de desnutrición y anemias; sobre todo en la primera etapa de la enfermedad celíaca, en la que suele presentarse carencia de vitaminas y minerales.

Está muy indicado en personas que sufren de osteoporosis, por su contenido en calcio y magnesio, que se suman a su alto valor nutricional.

Las hojas tienen más hierro que las espinacas y un alto contenido en fibra, vitaminas A y C y minerales como el hierro, calcio y magnesio, así como proteínas (15-18 %).
 
Posee un alto porcentaje de aminoácidos, especialmente de lisina, del que suelen estar carentes los cereales, alrededor de un 8 % de ácidos grasos como el escualeno y la mitad de su peso en almidón, por lo que se considera un excelente espesante. Si se consumen las hojas del amaranto como verdura, es necesario hervirlas por la presencia de oxalatos y nitratos: los granos se pueden tostar o consumir en forma de copos para añadir a la leche, sopas, legumbres u otros preparados.

Debido a la presencia de almidón sus granos pueden ser molidos y obtener una harina, para formar un buen espesante o utilizar para rellenos en cocina.

El Amaranto fue uno de los alimentos seleccionado por la NASA para alimentar a los astronautas. Ellos necesitan alimentos que nutran mucho, que pesen poco y que se digieran fácilmente.


sábado, 15 de enero de 2011

LECHE DE AMARANTO

  
La bebida o leche de amaranto es una bebida NUTRITIVA DE AMARANTO para consumo en individuos sanos y los pacientes con algún tipo de desorden metabólico. Las bondades de esta bebida son:

 Botana: ate de guayaba-amaranto y un buen queso

* Mejor balance de aminoácidos (lisina, triptófano y en aminoácidos azufrados), los cuales son esenciales para la salud, dando como resultado la combinación que cumple con los requerimientos recomendados por la Organización para la Agricultura y la Alimentación, F.A.O. (Food and Agriculture Organization) para una óptima nutrición humana.
* La bebida de amaranto es rica en escualeno, sustancia que ayuda a disminuir el contenido de colesterol en sangre.
* Es rica en calcio, elemento esencial de los dientes y los huesos, y en numerosos fluidos esenciales para la contracción muscular y la transmisión de la sangre.
* Es rica en hierro, componente esencial de la hemoglobina (sangre). La deficiencia de hierro causa anemia como resultado de niveles bajos de hemoglobina en la sangre.
* La bebida tiene un sabor muy agradable.


LECHE DE AMARANTO
 
Ingredientes:
2 cucharadas de amaranto en grano
1 ½ taza de agua caliente.
  
Preparación:
Remojar el Amaranto al menos dos horas. Llevar a hervor y cocinar a fuego mínimo unos minutos. Colar con un lienzo y endulzar si es necesario. Esta leche es utilizada en los países andinos para alimentar a los bebes. No resulta alergénica, siendo muy alcalina y proteica.

 

sábado, 8 de enero de 2011

AMARANTO - AMARANTHUS CAUDATUS

Popularmente conocida como “alfalfa de los pobre”, “ataco” en Ecuador y Guatemala, “kiwicha y achita” en Perú. Es una planta anual que alcanza los 2 metros de altura cuyos tallos presentan un terminal pubescente. Sus hojas son lanceoladas u ovales de color verde con pequeñas manchas rojizas. Posee unas hermosas flores anaranjadas, rosadas o púrpuras que se agrupas en inflorescencias terminales alargadas que pueden alcanzar una longitud de 50 a 100 cm ¡BELLÍSIMAS!

Es originara de las áreas tropicales de América, Asia y África donde es cultivada o crece de forma silvestre. Conforman esté género, 60 especies.

Su nombre deriva del griego “amaranton”, que significa “la que no se marchita”, ya que con la muerte de la planta sus flores permanecen indemnes.

En Grecia el amaranto fue dedicado a la diosa Artemisa de Éfeso, diosa de la fertilidad, atribuyéndole propiedades curativas especiales.

Sus hallazgos más remotos datan de 4000 años a.C en Tehuacan, Puebla, y en el estado de Veracruz, en la cueva de Coxtatlán, en las comunidades indígenas denominadas Ocampos.

Los Mayas quizás fueron los primeros en usar el amaranto, "xtes", como cultivo de alto rendimiento, apreciando especialmente su valor alimenticio.

Los Aztecas reconocieron sus propiedades alimentarias, junto a la quinoa, siendo una de las principales fuentes nutricias de aquellos tiempos.

Los Aztecas producían alrededor de 15 a 20 toneladas al año. Más de cinco mil hectáreas estaban dedicadas a la siembra de amaranto, y anualmente 20 provincias daban en tributo el grano de amaranto a su rey Moctezuma, en Tenochtitlán.

Los Aztecas lo utilizaron para la realización de transacciones, lo consideraron sagrado por su resistencia a las sequías, por el vigor que les proporcionaba y lo asociaron con el sol por su color rojizo. Tres razones suficientes para vincularlo a sus ritos religiosos.

En festividades religiosas, las mujeres Aztecas molían la semilla, la mezclaban con miel, melaza o sangre de víctimas humanas de algún sacrificio, y moldeaban la pasta resultante (zoale) en forma de estatuas de ídolos y dioses. Estas estatuas eran después consumidas durante las ceremonias religiosas.

El cultivo fue prohibido por los conquistadores españoles por creer que la planta constituía en sí misma una herejía.

Cuando Hernán Cortés invadió México, en 1519, e inició la conquista del imperio Azteca, tales ceremonias eran consideradas como una perversión de la Eucaristía Católica y fueron vetadas. A fin de destruir la religión y eliminar sus rituales paganos Cortés prohibió todo cultivo de amaranto, ordenó que los sembradíos fueran quemados o aplastados, y mandaba a cortar las manos de las personas que fueran sorprendidas en posesión o cultivo de este grano.

De esta manera impusieron como grano al trigo que era exclusivo de la corona española, constituyendo así una ventaja económica para el país conquistador.

Los Incas lo denominaron “kiwicha” (pequeño gigante) y lo respetaban principalmente por sus poderes curativos.

En muy poco tiempo el cultivo de amaranto, con alto valor agrícola y religioso, se hundió en el olvido. Debido a la Inquisición de Cortés, “las especies de grano de amaranto son casi desconocidas y desde entonces han permanecido en estado letárgico como cultivo alimenticio. Su producción decayó vertiginosamente entre 1577 y 1890, y existen pocos registros de producción del grano después de esa fecha. Sin embargo, fue durante este período cuando llegó a África y Asia, y muchas de sus formas ornamentales fueron introducidas en los jardines Europeos” señala el historiador Vargas López.

En las últimas décadas el cultivo del amaranto se ha difundido de manera exponencial en varios países del mundo. India es uno de los países que ha adoptado el amaranto más decididamente.

La gran cantidad y variedad de platillos preparados con semilla y con hojas de amaranto que encontramos en la comida hindú, nos demuestran el arraigo que éste tiene entre la población.

Hoy día, India es uno de los principales productores de amaranto en el mundo.

En muy poco tiempo el cultivo de amaranto, con alto valor agrícola y religioso, se hundió en el olvido.

Son utilizadas con fines alimentarios y medicinales las semillas y las hojas.

Las semillas han constituido a lo largo de cientos de años una fuente nutritiva muy importante para los pueblos de Sudamérica.

El estudio nutricional de la semilla seca evidenció un contenido proteico elevado, el cual es medido a través de un puntaje que toma como cifra máxima 100, de acuerdo a lo establecido por la FAO (Food and Agricultura Organization) y la OMS (Organización Mundial de la Salud).

Además de su aporte alimenticio, se ha reportado que las partes aéreas presentan actividad antimicótica frente a ciertos hongos fitopatógenos en cultivos de tabaco y actividad antibacteriana.

En el laboratorio demostró presentar propiedades antioxidantes e hipolipemiantes ya que redujo los niveles de LDL colesterol y colesterol total y aumentó los niveles séricos de HDL colesterol, en hámsters alimentados con semillas o aceite de amaranto. También se observó una disminución de la absorción del colesterol de la dieta a nivel intestinal.

En Ecuador se utiliza la infusión de las hojas y/o inflorescencias como antidiarreico y antihelmíntico. En forma de gargarismos se indica en amigdalitis y sangrado de encías.

En las Islas Canarias se utiliza la infusión de las partes aéreas como antiséptico bronquial y diurético.

En Malasia se utiliza una especie como diurético, antifebril y como antídoto de picaduras de serpientes.

En India se la utiliza en forma de compresas como antiinflamatorio.

Con las hojas se pueden realizar decocciones al 5% y consumir 3 tazas diarias de la misma con fines astringentes intestinales. También se puede utilizar la decocción de las hojas (150-200 mg/litro de agua) en cataplasmas o fomentos en uso externo.

Debemos recordar que tanto el amaranto, la quinoa y el mijo son poligonáceas de Alto Valor Biológico, por lo tanto poseen los aminoácidos no esenciales y esenciales o sea aquellos que no fabrica nuestro cuerpo y que debemos incorporar con la alimentación para la formación de todas nuestra proteínas.

El Amaranto es rico en lisina, cistina, metionina, hierro, fósforo, calcio, magnesio, vit A y B.

Ideal para nuestra alimentación y la de nuestros niños, ya que lo pueden incorporar en las papillas desde los 6 meses, especialmente aquellos niños que no comen carne.

Bibliografía: Tratado de fitofármacos y nutracéuticos – Dr. Jorge Alonso

Alimentación infantil – Dra. Elba Albertinazzi

Crónicas precolombinas del historiador Vargas López

sábado, 1 de enero de 2011

AMARANTO GOURMET

El Amaranto es una planta de hoja ancha, con flores violetas, anaranjadas, rojas y doradas.

Se trata de una legendaria planta, con más de 5000 años de historia, utilizada antiguamente en las ceremonias rituales. Era uno de los cultivos básicos que recibían los antiguos AZTECAS como tributo.

El Amaranto o huautli está estrechamente ligado a la historia de las civilizaciones milenarias que han poblado el Continente Americano: MAYAS, AZTECAS e INCAS. Se puede aprovechar toda la planta: el tallo se consume como a verdura, la hoja se emplea para guisados. Pero la parte más utilizada es su semilla, que presenta un alto contenido nutricional.

El Amaranto contiene un alto valor nutritivo el que luego de cuatro siglos ha comenzado a ser revalorado.

Su uso fue prohibido por los españoles a su llegada a América por usarse en sacrificios humanos.

Sopa de Fideo en caldo de frijol de Amaranto

1 taza de harina de amaranto 1 diente de ajo

1 ½ litros de caldo de frijol 1 taza de queso blanco rallado

1 paquete de fideo delgado 2 chiles serranos

1 jitomate mediano sal al gusto

1 trozo de cebolla

Desmadeje el fideo sin desbaratarlo y fríalo en aceite, hasta que dore parejo. Muela en la licuadora jitomate, cebolla y ajo con sal y viértalo al fideo dorado. Deje sazonar, agregue los chiles. En el caldo de fríjol disuelva la harina de amaranto y añádalo a la sopa. Deje hervir, pruébelo de sal y cuando haya ablandado el fideo apague el fuego. Sirva la sopa con queso rallado.

Barras Cantarinas

Para prepararlas se toman semillas secas de amaranto. Se limpian y se ponen a remojar durante varias horas. Después se escurren y tuestan en cómales calientes de barro o metal, moviéndolas constantemente hasta que revientan. Entonces se mezclan con miel y piloncillo, y el conjunto se amasa uniformemente para después cortarse en forma de barras o figuras, aderezadas con nueces y pasas.

Pastel de Amaranto

¼ kg. de harina de amaranto 3 cdas. de polvo para hornear

¼ kg. de harina de trigo 1 taza de leche

½ kg. de mantequilla 5 huevos.

400 g. de azúcar

Ponga la mantequilla a derretir y retírela; agréguele las yemas y el azúcar, bata hasta que tenga consistencia cremosa. Cierna las harinas y el polvo de hornear, incorpore las claras batidas a punto de turrón, siga trabajando, agregue la leche, bata todo perfectamente, por último agregue nueces o pasas. Engrase un molde y hornee de 30 a 35 min. a fuego regular.

Alegrías

Ingredientes:

1/4 de kg. de semillas de amaranto

1/4 de kg. de piloncillo

Pasas, cacahuates o pepitas al gusto

Preparación:

Remoja las semillas de amaranto en agua durante 6 horas.

Sácalas y ponlas a secar en una tela de alambre muy fina, las aberturas de la tela no deben permitir el paso de las semillas.

Una vez secas, tuéstalas en un comal, removiéndolas constantemente hasta que tomen un color blanquecino.

Hierve el piloncillo en agua, mézclalo con las semillas y amasa hasta obtener una pasta uniforme.

Dales la forma que desees o córtalas en cubitos o barras extendiéndola sobre una superficie plana.

Puedes agregarle pasas, cacahuates o semillas de calabaza (pepitas) al gusto.

Pan de Amaranto

3½ tazas de harina blanca

3½tazas de harina integral

1½taza de harina de amaranto

¼ de margarina

3 huevos

1 cucharada levadura

1 cucharada de sal

¼ taza azúcar

3 tazas leche o agua tibia

Se prepara la levadura con 1 ½ taza de agua o leche tibia, 1 cucharada de azúcar; se deja fermentando durante 15 minutos en lugar tibio.

Se mezclan los tres tipos de harina en un bol grande y se le agrega la levadura preparada.

Se disuelve la margarina en el resto del agua tibia, junto con el azúcar y la sal. Se mezcla esta solución a la harina y se le agregan los huevos.

Se forma la masa. -se regula la consistencia incorporando más agua o harina según sea necesario-. Se deja en un lugar tibio hasta que aumente de volumen. Amase suavemente, separando en pequeñas porciones con las que se forman los panes.

Ponga en bandeja enharinada y deje en lugar abrigado para que continúe aumentando de volumen. Pinte con leche, agua o yema y ponga en horno previamente calentado.

Horchata de Amaranto

Ingredientes:

1 Litro de leche

3 Cucharadas de harina de Amaranto

Miel de abeja o azúcar

3 litros de agua

Canela en polvo

Preparación:

Endulzar 1 litro de agua con miel o azúcar

Disolver la harina en el agua restante (2 litros).

Dejar reposar durante 10 minutos

Colarla y añadirla al agua endulzada.

Añadir la leche al gusto y espolvorear la canela.

Servir fría.